23 de octubre de 2017

Montaron una industria para impulsar negocio paralelo a la cerveza artesanal

Trajeron la iniciativa de EE.UU. y esperan que se convierta en la nueva tendencia del mercado. Trabajan con tres marcas locales.

La idea les surgió de la necesidad de poder tomar cerveza artesanal desde su casa, que si bien ya puede lograrse mediante el tradicional botellón o growler, la lata posee varias características que lo hacen superior. En primer lugar, el aluminio brinda una mejor calidad y conservación de la cerveza por impedir la entrada de luz al interior; en segundo lugar la lata puede ser enfriada muy rápidamente, más aún si se lo compara con los tradicionales envases; y por último la manipulación del aluminio es mucho más sencilla que la del vidrio. Además de todo esto la lata también posee ventajas en cuanto a reciclaje.

Uno de los socios del proyecto, Leonel Mazzaferro, es fabricante de cerveza, por lo que pudieron aprovechar su planta productora para montar allí el sistema de enlatado. La inversión realizada a fines del 2016 empieza a ver sus frutos después de diez meses y posibilitó la puesta en marcha de un sistema que permite una producción máxima de 120.000 latas mensuales. Suficiente como para suplir con creces la demanda del mercado rosarino.

Cans Co comenzó con sus funciones hace menos de un mes y ya cuenta con tres clientes de renombre: las marcas Daniel O., Bruguer y Schoenfeld. Según sus proyecciones, se trata de un servicio que a la mayoría de las cervecerías de la ciudad les interesará adquirir. Tal es así que esperan poder expandirse a todo el país y llegar, en un lapso de tres años, a los mercados de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza. A su vez, estiman que el precio final que tendría la lata de 473cc oscilaría entre los 50 y 60 pesos, dependiendo de las variedades y las marcas.

Eugenio Harraca, encargado junto a Leonardo Pellicciotti del área de comercialización, habló con punto biz y precisó algunas cuestiones sobre el funcionamiento de la empresa: “Nosotros damos la posibilidad a los productores de que puedan ofrecer sus variedades de cerveza no sólo en bares sino también en almacenes o distintos negocios, lo que permite ampliar el nivel de ventas y acercar el producto a la gente. Si bien la comercialización queda a cargo del productor, nosotros nos encargamos del traslado y del etiquetado, que lleva el logo de cada marca; e incluso ofrecemos la posibilidad de diseñar el logo si la marca no lo tuviera”.

El grupo, completado por el licenciado en economía Mateo Muñoz, tiene muchas expectativas en poder favorecer al crecimiento y la generación de trabajo en toda la industria de la cerveza artesanal: “queremos que ellos crezcan”, indican. 

 

Fuente: Punto Biz