28 de noviembre de 2017

El sueño de ser campeón en casa

Alejandro Bucci llegará como líder a la última cita del TN Clase 2 en Rosario, un circuito renovado pero que conoce de memoria. "Es más de lo que había imaginado", le dijo a Ovación.

Es un apasionado de los fierros. De hecho, tiene su propia estructura en pleno corazón de Villa Gobernador Gálvez. Ahí trabaja por un sueño que se fue agigantando con el paso del año y que está a las puertas mismas de concretarse: ser campeón del Turismo Nacional y en Rosario. Alejandro Bucci jamás imaginó vivir esta realidad, pero ahí está, al alcance de la mano. Ganó en la primera fecha, repitió en la octava y llegó a la definición en el renovado Juan Manuel Fangio arriba de todos con 223 puntos, cinco más que Ariel Michieletto y 11 más que Tomás Bergallo. Será para alquilar balcones, porque la ciudad tendrá un digno representante en la Clase 2 a quien apoyar, además de Leonel Larrauri, el baigorriense que también se ilusiona en la Clase 3 aunque dependa más de un milagro.

Claro que Bucci no tiene mucho tiempo para detenerse. Desde que regresó de Buenos Aires, donde culminó 8º, el Ford Kinetic fue despanzurrado. La caja, las suspensiones y el motor fueron revisados a conciencia, la pintura también, pero en el medio además prepara el auto del entrerriano Gabriel Scordia, de la Clase 2, y los tres del Car Show Santafesino que el último domingo corrieron en Rafaela, donde su hermano Luciano aún pelea por la corona del Turismo Santafesino 1800. Precisamente, Luciano lo reemplazará en 2018 en la butaca del Kinetic y el mayor de la familia colgará el casco. "Si es como campeón será estupendo", dice el aguerrido piloto de Villa Gobernador Gálvez.

"Haber llegado hasta acá como líder y encima definir en Rosario es más de lo que podía haber imaginado. Mejor imposible. Cuando volví (el año pasado) a sentarme en un auto de TN lo hice con el objetivo de ganar de nuevo y, si se podía, pelear un campeonato. Y no puedo creer estar ahora en esta situación. Y mucho menos con el premio Coronación acá en Rosario", dice Bucci. Pese a la magnitud de lo que vivirá los tres primeros días del mes próximo en el Fangio, no quiere que su tranquilidad se vea alterada.

"Estos días por las noches me pongo a pensar en lo que pasará, pero la verdad es que hay que tomarlo tranquilo. Si se tiene que dar, se va a dar. Por supuesto yo haré todo lo que esté a mi alcance. Debo decir que llegamos muy bien. Ganamos en la primera carrera de La Plata, repetimos en La Pampa, fuimos punteros casi el ochenta por ciento del campeonato y tener esos puntos de ventaja sobre Michieletto y Bergallo la verdad que es muy bueno. Puedo terminar la carrera detrás de ellos y ser campeón", analizó Bucci.

Bergallo llegará con 45

kilos de lastre y Michieletto con 35. Vos tendrás 15. ¿Influirá mucho eso?

En el TC, que son bestias de 1.400 kilos (los autos del TN pesan alrededor de mil), se quejan por 20 kilos, así que claro que influyen. Me parece por mis cálculos que a Michieletto y a mí nos corresponderían cinco más a cada uno. Está claro que me puede beneficiar, con más razón porque es un circuito que ellos no conocen.

Vos lo conocés de memoria, al menos toda la parte en que ya se venía corriendo. ¿Es realmente una ventaja?

A mí me parece que sí. Hay circuitos que por conocerlos bien les sabés las mañas, dónde están las partes en que se puede sacar ventaja. El TN no corrió en este autódromo y yo sí lo hice en el Car Show. Las partes trabadas son muy técnicas y a mí me gustan.

Igual no va a ser el mismo

por el alargue que se está haciendo a la pista. ¿Qué referencias tenés sobre eso?

Me parece que va a ser un poco más peligroso. Se alargó la recta que sigue a la principal y al final de la misma habrá un paredón y los autos deben volver en una curva que se recorre en primera. Me parece que esa desaceleración puede traer complicaciones. El circuito ahora va tener de todo un poco. Partes muy rápidas, o más de la que tenía, y las trabadas de siempre.

¿Y cómo vas a correrlo?

Como te dije, tranquilo, conociendo la ventaja que tengo y dando todo de mí. Yo estoy muy satisfecho por el año que hicimos, cumplí la deuda de ganar y ahora falta la frutilla del postre.

¿Y te bajás nomás, pase lo que pase?

Sí. Ya está decidido. El auto lo va a correr Luciano el año que viene. No hay presupuesto para tener dos autos en pista. Correr los dos es más impensado que cuando soñaba con el premio Coronación en Rosario.

Pero se dio. Se corre en Rosario. Si aparece el presupuesto...

Ya sería soñar demasiado...