21 de septiembre de 2018

El dibujo como aventura

El jueves próximo inaugura una muestra del ilustrador Carlos Barocelli, un rosarino reconocido a nivel internacional.

Siempre sumergirse en el mundo de la historieta es una aventura. Esa aventura puede ser aún más interesante si está acompañada por los trazos sensibles de los plumines o lápices. Que una mancha de acuarela devele el misterio de una trama es en sí misma una operación casi del orden de lo sobrenatural. El jueves se inaugura en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa una muestra de Carlos Barocelli, que reúne algo de ese mundo que llega de la mano de la ilustración.

Barocelli nació y vive en Rosario. Es dibujante, ilustrador, historietista, maquetista y docente. Dirige el Estudio Sketchbook de Arte Gráfico y una escuela de dibujo que lleva su nombre. Pero su trabajo atrae por ser heredero de nombres clave en el mapa de la historieta.

"En una modernidad que amenazó con la extinción de la historieta tradicional (aquella dibujada con lápices, plumines y pinceles sobre la tentadora blancura del papel o la cartulina) para su reemplazo por la animación o por los casi mágicos avances de una tecnología cada vez más sofisticada pero también más sorprendente, que artistas como Carlos Barocelli sigan perseverando en ese género tan apasionante es sin duda un hecho que no debe pasar inadvertido", advierte Rafael Ielpi en el texto de presentación de la muestra.

La exposición inaugura el jueves a las 19.30 y es parte de las actividades programadas para la próxima edición de la convención de historietas Crack, Bang, Boom, que se realizará entre el 11 y 14 de octubre próximo.

Ielpi repara en Barocelli y en su "persistente vocación" ante el avance tecnológico sobre el género. Y recurre a la historia para recordar a maestros en los que el trabajo del dibujante rosarino puede inscribirse. "El dibujo, la ilustración tanto como el contenido literario de una historieta, de un cómic, fueron elementos indivisibles para una extensa nomina de talentosos dibujantes y guionistas que, a partir de la década del 50 y hasta la del 70 del siglo pasado, llevaron el género a altos niveles de calidad y creatividad. Entre los primeros figuran José Luis Salinas, Alberto Breccia, Arturo del Castillo, Hugo Pratt, Francisco Solano López, Paul Campani, Tulio Lovato, Lucho Olivera, José Muñoz, Walter Ciocca, Horacio Altuna, Gustavo Trigo y muchos otros".

Cita también a Héctor Oesterheld, "un nombre inevitable entre los guionistas, a la vez que un creador incansable de publicaciones que como Frontera y Hora Cero dieron a la historieta un alcance masivo".

Y en ese punto hay una conexión para valorar el trabajo de este dibujante rosarino. Francisco Solano López lo eligió para ilustrar la serie "La resistencia", de El Eternauta, de Oesterheld, aún no publicada. «Es una historia de Oesterheld que nunca se había llevado a la historieta. Dibujarla me llevó dos años de mi vida»", dijo el dibujante en una entrevista.

La obra del rosarino ha atravesado las fronteras del país para ser publicada en editoriales como Neosmedia (Sevilla), AC Estudio (Madrid), Parson Education (Londres) y Signe de Autori (Italia). Actualmente trabaja en "El pasajero del U977", una historia de terror del guionista Rodolfo Santullo.

"Como Eduardo Risso, mentor e impulsor de Crack, Bang, Boom, la anual y tal vez más relevante Convención Internacional de Historieta de Rosario, y uno de los primeros rosarinos en publicar, ganar prestigio y premios en Estados Unidos, Carlos Barocelli sigue trabajando en silencio, creando historias e iluminando textos, apostando a la perennidad de ese género que supo perdurar lozanamente en el tiempo", destaca Ielpi.

La muestra inaugura el jueves, a las 19.30, en el CCRF (San Martín 1080) y permanecerá expuesta hasta el 28 de octubre, de lunes a viernes de 9 a 21 y sábados, domingos y feriados de 10 a 20. Entrada gratuita.

 

Fuente: La Capital