17 de junio de 2019

Construirán un nuevo gasoducto entre Neuquén y Rosario

La licitación se anunciará el 15 de julio; se invertirán US$2000 millones

El anuncio era esperado por los petroleros y el presidente Macri casi se olvida de comunicarlo cuando subió al escenario. Casi al final de su disertación confirmó que el Gobierno llamará el 15 de julio a una licitación para construir un nuevo gasoducto, que una Vaca Muerta con Rosario. La falta de infraestructura para evacuar el gas de la cuenca neuquina es el principal cuello de botella para que siga aumentando la producción.

 Ese día saldrán los detalles de la licitación en el Boletín Oficial y las ofertas estarán abiertas por 60 días. En la Secretaría de Energía confían en poder adjudicarlo en los primeros días de octubre. Como el mayor problema en la Argentina es el costo del financiamiento por la suba del riesgo país, en el Gobierno confían en que si ganan las elecciones, la tasa de interés podría bajar justo para cuando el consorcio adjudicado tenga que salir a buscar el crédito necesario para la construcción.
 La obra en su conjunto costaría alrededor de US$2000 millones, pero el gasoducto se licitará en tres tramos. El primero, y más fundamental, irá desde Neuquén hasta Bahía Blanca, y debería estar terminado para el invierno de 2021. Esto tendría un costo de US$800 millones, que será financiado por tres actores: US$500 millones aportaría la Anses con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), US$150 millones se podrían conseguir con un préstamo de la agencia estatal estadounidense OPIC y el resto lo financiaría la empresa adjudicataria.
 
 El gasoducto podrá trasladar entre 15 y 17 millones de metros cúbicos/día (m3/d). Desde el puerto bahiense, luego se puede licuar el gas para llevarlo a Escobar por barco y desde allí distribuirlo en el centro-norte del país.
 Entre los interesados en participar están TGN y TGS, operadores de los principales ductos del país, pero en el Gobierno no descartan que haya una nueva empresa, a la que llaman TGC (por Transportadora de Gas del Centro), ya que este nuevo gasoducto pasaría justo por el centro del país.
 
 "El sector privado es el que debe financiar la infraestructura, pero el Gobierno es quien debe promover los medios para que esa infraestructura ocurra. La falta de ductos es el principal cuello de botella para sacar el petróleo y el gas que tenemos, y que nos permite desplazar las importaciones por producción propia", admitió Gustavo Lopetegui, secretario de Energía, ante los empresarios.
 
Fuente: La Nación