26 de enero de 2017

Pichincha, el polo gastronómico de Rosario que no deja de multiplicarse

Como Palermo en Buenos Aires, el tradicional barrio se subdivide y genera 3 zonas bien definidas

El barrio de Pichincha no deja de mutar: epicentro de la Chicago Argentina a principios del siglo pasado, hoy reconviertió su perfil adoptando distintas características al interior de sus calles. Al este, en el centro y al oeste pueden encontrarse ofertas bien definidas.

 

El fenómeno no obedece a una planificación oficial sino que se da como producto de la espontánea instalación de comercios y emprendimientos. Fue el mismo devenir del tiempo el que fue consolidando la división entre lo que podríamos llamar tres sub-zonas.

 

La primera categoría agrupa a los comercios ubicados en el extremo cercano a Boulevard Oroño. En el último año inauguraron Negroni y Ceviche, que se sumaron así a Rock & Fellers, Johnny B Good y Chinchivira. En poco tiempo abrirá sus puertas también, en la esquina de Boulevard Oroño y Güemes, una nueva sucursal de Queens.

 

El segundo grupo de locales se distribuye en las arterias interiores del barrio, desde Santiago hasta Richieri. Allí se radican una gran cantidad de propuestas para los más variados paladares. Desde Lupita (de estilo mexicano) hasta la parrilla Estación Güemes, se replican bares y restaurantes sin solución de continuidad.

 

Por último, en el extremo oeste del barrio se consolidó un eje cervecero que tiene en las calles Brown y Avenida Francia sus principales sedes. Se pueden reunir casi una decena de locales donde la cerveza artesanal es la protagonista. Pueden sumarse aquí Fenizia, Collins, Barba Roja, Zahlen y Daniel O., entre otros.

 

El tiempo dirá si esta división se afianza o se re define en algunos años. Más allá de estas conjeturas, Pichincha va imponiéndose como un polo gastronómico que no parece tener techo.

Fuente: Impulso Negocios