16 de diciembre de 2015

Las claves del sostenimiento de la actividad inmobiliaria en la ciudad

Por qué Rosario se posicionó como una de las plazas más atractivas del mercado inmobiliario aun a pesar de la desaceleración de la economía.

Por Agustín Lago

@AgustinMLago

La ciudad se convirtió en un centro de atracción para los desarrollos inmobiliarios. El crecimiento económico –que se desaceleró en los últimos cuatro años–, la tradicional inversión en bienes inmuebles y la amplia oferta que presenta, son algunos de los motivos por los que la plaza local mantuvo un buen nivel de operaciones.

Si una persona que visita o vive en Rosario tiene la posibilidad de verla desde el aire, podrá percibir que el Monumento Nacional a la Bandera es difícil de encontrar; quedó pequeño ante la ola de edificios que se hicieron en sus inmediaciones. Este ejemplo sirve, tal vez, para entender cómo la construcción hizo pie en la ciudad y se convirtió en uno de los sectores más dinámicos de la economía local y regional.

El crecimiento de la economía del 2003 al 2011 hizo que una parte de la ciudadanía tenga mensualmente exceso en pesos que, debido a la inflación, fueron colocados en distintas inversiones. La más común: los bienes inmuebles.

 

 

 

De todas maneras, la desaceleración de la actividad en los últimos cuatro años hizo que el sector ya no tenga el mismo ritmo y por ende las mismas expectativas. Sin embargo, el presidente de la Corporación de Empresas Inmobiliarias de Rosario (CEIR), Marcelo Gustafsson, explicó que desde marzo de 2015 “hubo más movimiento que años anteriores” en las operaciones de compra-venta, al igual que en noviembre, mes en el que se definió el próximo presidente del país.

Además, Gustafsson remarcó que los alquileres mostraron una curva de “actividad sostenida”. La clave de este comportamiento son los estudiantes que arriban cada año a Rosario. “Las dos zonas más demandadas de la ciudad son: inmediaciones de la Terminal de Ómnibus –por la cantidad de facultades– y el área delimitada por avenida Pellegrini y bulevar Oroño hacia el río.

Para el presidente de la Cámara de Empresas Inmobiliarias de Rosario (CADEIROS), José Ellena, el 2015 “fue un año bueno, que no escapó a la realidad de la economía nacional”. A la par del titular de CEIR, el directivo enfatizó que los alquileres “son el motor de los ingresos, pese a que los precios no son brillantes”.

Ellena manifestó que en los últimos años –este no fue la excepción– “la construcción desde el pozo generó buena cantidad de ingresos”. “Esto se explica porque una buena parte de la gente tiene excedentes en pesos y lo invierte en bienes, que es algo que siempre se mantiene o se actualiza el valor”, aclaró.

Una señal de este año: récord de producción, pero con techo bajo

El vicepresidente de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO), Ricardo Griot, señaló que este 2015 el rubro “tuvo un crecimiento de la actividad del orden del 8 por ciento”.

Según dijo Griot, parte de la dinámica de la construcción fue movilizada “por el programa PRO.CRE.AR, que tuvo menos impacto en Rosario que el resto del país respecto a la creación de empleo formal, no así en la venta de materiales”

Un dato llamativo es la producción de cemento. Este año alcanzó el récord de despacho pero la demanda fue superior. “El límite está entre 12 y 14 millones de toneladas, a razón de un millón de toneladas por mes. Más de eso la industria no resiste, se llegó al techo, pero es bajo”, subrayó el vicepresidente de CAMARCO. Por otra parte, consideró que Rosario “se consolidó como una alternativa importante en la industria de la construcción y moviliza a la economía local y regional”.

 

Fuente: Corporación de Empresas Inmobiliarias de Rosario, Cámara de Empresas Inmobiliarias de RosarioCámara Argentina de la Construcción 

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