6 de diciembre de 2021

Impactante crecimiento de la telemedicina durante la pandemia

La empresa más importante que brinda este servicio en el país es rosarina: pasó de 4 mil consultas a 100 mil en pocos meses. Se vienen las telecabinas y los paneles multidiagnósticos

La crisis que impuso el Covid alcanzó al sistema de salud de distintos modos, y provocó cambios de conducta entre los pacientes y los médicos, entre ellos un crecimiento notable del uso de sistemas de telemedicina.

Durante la cuarentena estricta, allá por marzo de 2020, en medio del desconcierto, la necesidad de prepararse para lo que venía y el temor a los contagios, los servicios médicos públicos y privados solo sostuvieron la atención de urgencia.

La situación se prolongó durante meses, incluso más allá del aislamiento obligatorio. Así, durante casi un año, aun cuando clínicas, sanatorios y hospitales retomaron la entrega de turnos y la asistencia presencial, las personas prácticamente no iban. Y las pocas que lo hacían admitían que les generaba preocupación.

En ese contexto, la telemedicina, que es la prestación de servicios a distancia (especialmente mediante videollamadas y chats) empezó a tomar protagonismo.

Doc 24, una empresa rosarina que brinda este servicio desde 2016 en toda la Argentina (y también en otros países de Latinoamérica) vio crecer en forma llamativa las prestaciones al punto que pasó de atender 4 mil consultas en mayo de 2020 a 100 mil ya durante la primera ola, manteniéndose en este momento en unas 50 mil consultas mensuales.

En lo que va de la pandemia hicieron 3 millones de atenciones y llegaron a 10 millones de personas por los distintos convenios que disponen acceso a la plataforma.

Para utilizar el servicio hay que constatar que la obra social o medicina prepaga a la que se está asociado esté vinculada al sistema y tener la aplicación correspondiente.

Las soluciones de teleasistencia médica “no pretenden reemplazar a la consulta presencial, sino que están diseñadas para sumar, para acercar al paciente al sistema y facilitarle la atención y, como sucedió en plena crisis del Covid, a resolver situaciones en el medio de una emergencia sanitaria o en sitios que están alejados de todo”, dijo a La Capital Aníbal Krivoy, director médico de Doc 24.

El profesional pertenece a su vez otra compañía de servicios innovadores en telemedicina. Esa empresa está impulsando la instalación de “estaciones diagnósticas”, unas cabinas donde un individuo ingresa y puede hacerse distintos chequeos en forma rápida (medirse la presión, realizarse una espirometría, auscultarse, obtener imágenes de alta precisión de oído, boca y piel, por ejemplo, y pedir el asesoramiento de un médico en el momento que lo atenderá online y lo guiará sobre los pasos a seguir.

Ya hay uno de esos “consultorios inteligentes” en Once y en breve se habilitan los de la estación Retiro y en Constitución, en Buenos Aires.

También está previsto que en Mar del Plata se instale uno y se analiza la posibilidad de que se coloque otro en Rosario en breve.

Además, otro de los productos que ofrecen es un panel multidiagnóstico pensado para instituciones médicas, especialmente aquellos centros de salud alejados de zonas urbanas ya que esta herramienta permite tener disponibles especialistas las 24 horas y cuenta con instrumental de última generación para diagnósticos de todo tipo.

Uno de los aspectos que Krivoy destacó es que tanto en la plataforma de videollamadas como en las cabinas inteligentes (que son más de autogestión) o mediante el uso de los paneles (que sí o sí deben estar conducidos por un médico, paramédico o enfermero), el historial del paciente (incluidos todos los estudios por imágenes que se realiza) queda registrado. Luego, con sólo ingresar los datos, se obtiene toda la información, algo fundamental tanto para el paciente como para el médico que hace el seguimiento, en forma online o presencial.

Futurista

“En el caso de los paneles, permiten extender los alcances de la atención sanitaria mediante una plataforma de telemedicina. El sistema posibilita que el profesional no médico (enfermero, paramédico) pueda realizarle al paciente diversos chequeos y, si es necesario, efectuar un videoconsulta médica donde esa persona, guiada por un profesional médico al otro lado de la plataforma puede usar distintos dispositivos para acceder a datos que le permitan la realización de un diagnóstico seguro y eficiente”, señaló Krivoy.

Uno de los ejemplos que expuso es el siguiente: en un centro de salud alejado de un hospital o sanatorio por más de 300 kilómetros se instala uno de estos paneles. Llega una mujer embarazada con algún tipo de complicación. Se solicita la atención virtual de un obstetra que puede pedir un estudio por imágenes específico. Allí es el médico el que decide si esa mujer debe trasladarse de urgencia o no. “Se calcula que más del 50 por ciento de los traslados que se hacen en forma habitual no son necesarios. Por otra parte, a veces se pasan por alto situaciones que sí requieren de una internación inmediata. Por eso decimos que esto no reemplaza a nadie en el sistema de salud, sino que ahorra recursos y salva vidas”, puntualizó Krivoy.

Existen centros de salud que cuentan con un médico que va cada dos semanas o una vez al mes, y especialistas que asisten dos o tres veces al año. “En estos casos contar con equipos multidiagnósticos con asistencia profesional es una solución muy importante”, explicó el médico, quien agregó: “Argentina tiene enormes distancias entre un punto poblado y otro. Entonces impone problemas sociales pero también geográficos al sistema de salud. En Vaca Muerta (en Neuquén), por ejemplo, instalaron la primera plataforma multidiagnóstica del país y la experiencia es muy buena”.

Krivoy hizo hincapié en que las cabinas y los paneles multidiagnósticos son desarrollados y construidos por trabajadores santafesinos: “Salvo lo específico del instrumental diagnóstico que lo traemos desde afuera todo lo demás, incluido software, hardware, carrocería, está realizado por gente de la zona”.

 

Fuente: La Capital