28 de marzo de 2022

El Downtown rosarino: una zona que quiere recuperar la noche

Sebastián Lamelas, presidente de la Fundación Rosario, hizo mención a la investigación que realizaron para saber qué necesita el centro para volver a brillar.

De a poco, después de la desolación que dejó la pandemia en la actividad nocturna, especialmente en el centro de la ciudad, empieza a notarse algo más de movimiento los fines de semana y las vísperas de feriado en lo que algunos ya llaman el Dowtown rosarino.

La verdadera reactivación se espera hacia fin de año cuando abra el nuevo Rock & Feller's, el conocido restobar que instalará su tercera sucursal en San Lorenzo y San Martín, donde funcionó hasta hace poco Savoy Grand Café. La expectativa del sector gastronómico y de la Municipalidad es que la novedad traccione clientes, pero también impulse nuevos emprendimientos en la zona incrementando la circulación de gente.

El bar del Savoy, a su vez, no se va lejos ya que reabrirá en Córdoba y San Martín, un punto estratégico de este circuito.

 

Lo cierto es que por ahora hay muy buenas intenciones, pero pocas acciones firmes para darle un nuevo impulso al centro.

El área delimitada por Córdoba, Sarmiento, el río y Laprida tuvo otro color durante las noches en los 80 y los 90 años cuando muchos de los boliches y bares de moda estaban ahí. De esos tiempos, quedan muy pocos bastiones en pie.

La mayoría de los lugares que brillaron en aquella época, como Contrabando, Berlín, El Barrilito, El Elefante Blanco, La Casa del Bajo, Barcelona, El Viejo Galeón y Bucanero, dejaron sus recuerdos en miles de rosarinos pero no quedan rastros de aquel esplendor.

“Nosotros salíamos de noche en el centro, la movida estaba ahí”, recuerdan los nostálgicos habitués de esos espacios que venían de todos los barrios a esos bares y boliches. Muchos, incluso, esperan volver.

 

 

Tiempos de cambio

Con la renovación gastronómica de otros sectores de la ciudad, que se fue dando en los últimos 15 años y se intensificó en la última década (el caso más emblemático es Pichincha), el interés nocturno de los rosarinos se diversificó.

Si se observa el mapa de las ofertas gastronómicas actuales, están concentradas en todos los puntos cardinales de Rosario, incluso se está reactivando zona sur, donde llegan franquicias de reconocidos bares que buscan instalarse allí, algo impensado años atrás. De todas esas áreas el punto más flojo es el centro.

Año tras año, la zona "se fue muriendo" y la epidemia de Covid le dio “el golpe final”, tal como lo describen integrantes del rubro gastronómico, quienes se entusiasman con la posibilidad de que el año próximo el Downtown recupere algo de su brillo después de que abra Rock & Feller's.

La Municipalidad ve con entusiasmo la posibilidad de que se reactive el centro. “Es una de nuestras obsesiones”, dijo, contundente, Sebastián Chale, secretario de Desarrollo Económico y Empleo de Rosario.

El funcionario confía en la oportunidad que le dará a la zona la apertura del emblemático bar que, de hecho, dio el puntapié para la activación de Pichincha hace una década.

El nuevo emprendimiento, que se ubicará en las instalaciones del Splendor Savoy Hotel, tendrá 900 metros cuadrados y capacidad para 300 personas.

Será una tienda ancla o tienda gancho, como se denomina a los espacios que atraen clientes hacia una zona determinada. Y en ese sentido representa una oportunidad en el marco de la crisis del sector, teniendo en cuenta que hay decenas de locales vacíos en los alrededores y a precios más accesibles que en otros lugares de Rosario.

“Entendemos que la apertura tendrá un buen efecto. El municipio está desde hace tiempo generando planes y acciones para poner en valor al centro”, mencionó Chale.

La colocación de luces led, la renovación de la dársena en la plaza Sarmiento, el plan de extensión de la peatonal San Martín, la instalación de un “nuevo Mercado del Patio” donde funciona el Centro Cultural Fontanarrosa (plaza Montenegro) y "la búsqueda de inversores que apuesten a la esquina de Córdoba y Sarmiento (donde estaba Falabella), que esperamos que se convierta en un centro comercial que incluya una propuesta gastronómica que esté abierta por la noche, se anotan, según el funcionario, entre los objetivos de la Municipalidad.

“La Noche de las Peatonales fue otra muestra de este plan de reactivación y de cómo a los rosarinos les interesa sumarse cuando la oferta es atractiva. Estamos convencidos de que llevar propuestas interesantes y poner aún más en valor la oferta cultural que ya existe en el centro _y que empieza a moverse nuevamente después de la crisis del Covid_ van a empezar a activarlo”, dijo el secretario.

También mencionó que se fortalecerá la propuesta gastronómica en el hotel Majestic. “Todo esto se intensificará con la posibilidad de peatonalizar San Martín, entre Santa Fe y San Lorenzo, para que de alguna manera el corredor se unifique con Sargento Cabral, que es un lugar hermoso de la ciudad y que debería tener otro tipo de movimiento”, destacó Chale .

De a poco

Sábado a la noche. Calle Maipú al 500 y al 600 no duerme. Son las once y ya hay gente esperando para entrar a Feuer y El diablito, dos bares que se han convertido en un polo de atracción en el centro.

Tragos, tapeo, buena música y la posibilidad de permanecer hasta entrada la madrugada los hacen más que atractivos.

Victoria Rasia, una de las dueñas de Feuer, que abrió en noviembre de 2019, dijo a La Capital que si bien su bar ayudó a activar la nocturnidad, en la zona “faltan propuestas”.

La pandemia complicó todo y ahora hace falta poner el área en valor, con más fuerza que antes y planes concretos. “Hay una activación pospandémica, por llamarla así, pero medio espasmódica, no es tan fluida como lo ves en Pellegrini o Pichincha que ya tienen circuitos mucho más consolidados, pero en el centro se nota una reactivación”, señaló la empresaria.

Además, dijo, “la gente, en vez de hacer gastos a largo plazo hace salidas de satisfacción más inmediata” y eso se traduce en que se animan a salir más y gastar un dinero en una cena o buenos tragos.

“Creo que a Rosario le falta mucho para mejorar la noche y no solo para activar el Downtown, sino toda la ciudad. Que se actualice la ley de nocturnidad es fundamental, tenemos es una ley obsoleta que perjudica en muchos aspectos al funcionamiento de la noche”, puntualizó.

Rasia cree que el desembarco de Rock & Feller's sin dudas aportará mucho a un mayor movimiento para que el centro sea una verdadera opción para salir a comer o tomar algo de noche y no todo se concentre en Pellegrini y Pichincha.

 

 

Convocatoria

Sebastián Lamelas, presidente de la Fundación Rosario, una organización público privada que trabaja por el reposicionamiento de la ciudad, hizo mención a la propuesta Desafío Rosario, un espacio para generar ideas y acciones transformadoras por medio del que encararon una investigación para saber qué necesita el centro para volver a brillar.

“El primer capítulo del Desafío fue el downtown. Observando cómo había decaído en los últimos años (algo que sucede en todos los centros del mundo) pusimos el acento en escuchar a los rosarinos. Así llegamos a más de 3000 personas que habitan o visitan en el centro y recopilamos mucha información: sus problemáticas, sus necesidades. También tomamos las inquietudes de propietarios de locales, urbanistas, personalidades de la ciudad y autoridades”, comentó.

Desde la fundación, queremos ser “articuladores” para darle un nuevo impulso a la zona.

Están convencidos de que el trabajo conjunto puede activar la zona a corto, mediano y largo plazo aunque las mayores transformaciones no serán inmediatas.

“El tema gastronómico es muy relevante y sin dudas Rock & Feller's dará un nuevo impulso. Pero a eso hay que acompañarlo con más seguridad, más limpieza, más iluminación, avanzar en la extensión de la peatonal San Martín, reabrir y renovar galerías, convocar a más gente en definitiva. La noche de las peatonales fue una buena muestra del atractivo del centro cuando hay ofertas”, enfatizó Lamelas.

 

Fuente: La Capital