13 de marzo de 2019
Tecso: la cooperativa de software local más grande de Latinoamérica participará en ExpoAgro
En el stand participarán junto al Polo Tecnológico de Rosario y expondrán los resultados de la experiencia de 2018, que comprenden plataformas satelitales, periféricos, drones y software para volcar la información recabada a campo. Y sumarán el primer prototipo de un innovador dron fumigador para prestar servicio a grandes empresas.
Aunque en la cabeza de muchos las palabras campo y tecnología aparecen disociadas, quienes están inmersos en el rubro agropecuario bien saben que se trata de una de las actividades más tecnificadas que existen. No resulta casual entonces que las firmas especializadas en brindar soluciones tecnológicas vean allí una gran oportunidad para concretar negocios.
Tal es el caso de Tecso, la cooperativa de software más grande de Latinoamérica, que luego de sembrar sus primeros pasos en 2018 pone todas las fichas para que este año sea un antes y un después en su relación con el agro. Tras desarrollar una start up orientada a pequeños y medianos productores ya construyó el primer prototipo de un innovador dron fumigador para prestar servicio a grandes empresas.
En diálogo con Agrofy News, el director de Negocios de Tecso Ignacio Sanseovich contó que el acercamiento comenzó casi de casualidad, a través de contactos personales que lo llevaron a relacionarse con tres cooperativas agrícolas del interior santafesino: "De a poco nos fuimos metiendo en un área que descubrimos que tenía muchísimo potencial", relató, para luego decir que "en el campo hay muchísima información que muchas veces se encuentra dispersa, y la tecnología puede ayudar a concentrar, procesarla y tomar mejores decisiones".
El lazo con el sector fue tan intenso que la firma -que tiene sedes en Rosario, Buenos Aires y Colombia- decidió hacerse un lugar en Expoagro, la megamuestra que se realiza del 12 al 15 de marzo en San Nicolás. "Estamos entusiasmados, entendiendo que nos encontraremos con muchos actores que podrían llegar a vincularse con nuestra empresa, y mostrarles una forma distinta, complementaria e innovadora de hacer seguimientos y toma de decisiones, especialmente enfocada a pequeños y medianos productores” expresó Sanseovich.
Antes de 2018, Tecso no había tenido una relación fluida con el campo, ya que se especializaba mayormente con bancos, entidades financieras y gobiernos. Sin embargo, sí fue in crescendo su interés por los drones, ya que muchas empresas los requerían para diversos usos (seguridad en industrias, por ejemplo). Fue en base a este conocimiento que se logró una rápida inserción en el proyecto con las cooperativas, que dio lugar a la start up Dataterra.
En el stand de Expoagro, en el que participarán junto al Polo Tecnológico de Rosario, expondrán los resultados de la experiencia de 2018, que básicamente comprenden plataformas satelitales, periféricos, drones y software para volcar la información recabada a campo. A ello sumarán el otro gran proyecto que vienen trabajando desde Tecso, un dron fumigador que con sus hélices desplegadas alcanza los 3 metros de diámetro. Se trata de un dispositivo de mayor porte que presenta un sistema de bombas para que los productos fitosanitarios del tanque lleguen a los picos pulverizadores, respetando lo que se dicte a través del software.
"Sabemos que el tema de la pulverización es sensible, por eso creemos que la tecnología puede facilitar aplicaciones puntuales, direccionadas y prolijas, en línea con las normas regulatorios", indicó el empresario tecnológico.
Vale recordar que en Santa Fe hay en marcha un plan para que todas las producciones agropecuarias deban utilizar dispositivos que permitan a los técnicos del gobierno hacer un seguimiento en tiempo real de los trabajos a campo. En este marco resulta indispensable que haya tecnología al alcance de pequeños y medianos productores, para que este tipo de disposiciones no termine generando mayor concentración.
Crecimiento vertiginoso
Además de incursionar por primera vez en el agro, el año pasado fue para Tecso una verdadera bisagra en su historia. Es que además de mudarse a nuevas oficinas en el Distrito Tecnológico rosarino, pudieron cortar las cintas de su sede en Colombia. Hoy cuenta con más de 150 asociados y en su corta historia (se fundó en 2003) pasó de facturar 300 mil pesos anuales a 72 millones.
Por Juan Chiummiento | Agrofy News
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