18 de marzo de 2020

Los detalles de la réplica exacta de la pistola de Manuel Belgrano

Construida en Rosario, Santa Fe, es la primera vez que se hace una copia como ésta. El rosarino Osvaldo Gatto describió a la pieza histórica y confirmó para quién será la primera de las veinte que fabriquen en su taller.

La pistola del General Belgrano se encuentra en el Museo Histórico Nacional y le fue obsequiada por el Cabildo de Buenos Aires, en 1814, en honor a las victorias de Tucumán y Salta. Es española de la región de Ripoll, y según investigaciones se especula que fue comprada en Buenos Aires. 

“Nuestro trabajo no es un trabajo desconocido en los países del primer mundo. Si bien la actividad de hacer réplicas de armas antiguas no es algo común de ver, en EEUU y países de Europa hay muchas personas que se dedican a esto, pero no abarcan el amplio espectro y variedad con que lo hacemos nosotros", contaba Osvaldo Gatto, titular del Taller, Artesano y Profesor de Historia.

El taller está ubicado en la zona sur de la ciudad de Rosario, donde reciben consultas de diferentes museos nacionales e internacionales, e incluso han restaurado piezas para el museo de Berlín. Todas las obras y detalles están en su página web www.osvaldogatto.com.ar.

Al cumplirse 250 años de su nacimiento y 200 de su muerte, el gobierno nacional decretó al año 2020 como el del "General Manuel Belgrano" en homenaje al insigne creador de nuestra bandera en la ciudad de Rosario. Y justamente Osvaldo, su hijo Martín, su hermano y su padre, los únicos colaboradores del taller, todos rosarinos, decidieron replicar por primera vez en Argentina, un arma de fuego de un prócer fundacional. “Nos enorgullece mucho el haber reproducido esta pieza homenaje de Manuel Belgrano como es su pistola, de las cuales habrá por el momento solo 20 réplicas”, destacaban desde el taller.

Uno de sus seguidores de redes sociales es Manuel Belgrano, el chozno nieto del General y presidente del Instituto Nacional Belgraniano. “No puede creer que hayamos hecho una réplica tan exacta. Por supuesto, la número uno de estas pistolas, será la suya”, añade Gatto.

Características de la pistola

Tiene el mecanismo de encendido de chispa, o también llamado a pedernal. Es una pistola de viaje, o de portación. No es una pistola militar.

La culata está construida en madera de nogal, reforzada con bronce calado y claveteado con clavos de bronce. Tiene el guardamontes de acero, y grabados en la platina. La parte del caño está construido a la manera española, es decir tiene el caño construido a dos órdenes: una mitad del mismo es redondo y la otra mitad tiene ocho caras que se vuelven cónicas hacia la mitad. Por lo tanto es redondo y luego troncocónico hasta el fondo del mismo.

Pesa aproximadamente 890 gramos. La original unos 25 a 30 gramos menos, y se debe a la densidad de la madera y al desgaste propio de una pieza que tiene 200 años.

Por otro lado el calibre de la munición que dispara es de 16 milímetros. El largo del caño es de 20 centímetros, y tiene gancho para portar en la cintura, “por lo tanto es una pistola que Belgrano la ha transportado consigo ya sea en una faja o en un cinto. No tiene marcas ni punzones, por lo que sospechamos entró al País en tiempos de la dominación napoleónica a España. Los armeros se cuidaban de identificar sus obras” añadía Gatto.

Es una pistola de avancarga, que significa que se carga por la boca, por delante. Las antiguas son así, las modernas ya no se cargan por la boca por lo que son de retrocarga.

Se cargaban echando la pólvora dentro del caño y después se le metía la munición con una baqueta impulsándola hasta el fondo, y de esa manera quedaba cargada. Luego se le ponía pólvora al costado para que encendiera. Es ahí donde trabaja el pedernal, que le va a dar la posibilidad de generar las chispas que, encendía el cebo de pólvora, se comunicaba con el interior del caño por medio de un oído, un agujerito que hacía saltar el disparo.

Diferencia entre un arma moderna y una réplica de arma antigua

Gatto deja claro que no se debe confundir lo que puede generar las armas de fuego modernas y la proliferación del delito con algo que es una pieza artística, una obra de arte.

“La legislación argentina, como en importantes países del mundo, no considera éstas réplicas como armas. De hecho no deben registrarse y son libres todas las que sean modelos anteriores a 1870. Asimismo, la Ley deja claro que son objetos obsoletos, impensados y muy poco idóneos a la hora de cometerse un delito”, explicaba el Profesor de Historia.

“Las armas antiguas son parte de la historia. Ésta es una pieza homenaje de más de 200 años y está vinculada por excelencia al arte de su construcción y su famoso propietario, el General Belgrano. Un sable, una daga, una pistola o un fusil, antiguos, son testimonios de la libertad”, sentenciaba.

“Nosotros las emparentamos más con una obra de artesanal y de tecnología antigua más que con las armas propiamente dichas. Son un pedazo de historia viva, que nada tienen que ver con las armas modernas ”, concluía Gatto.

Por Matías Zupel - Fundación Rosario

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