22 de abril de 2020

Amistad y solidaridad, un factor común ante la emergencia en Rosario

Cuarentena Solidaria Rosario es una acción de dos rosarinas para confeccionar y donar barbijos y demás insumos. Con más de 60 costureras distribuidas en toda la ciudad y la región, ya abastecieron a 20 entidades y van por más.

Angélica Miotti y Brenda Tuninetti son amigas, rosarinas, y juntas comenzaron una campaña que asciende a pasos más acelerados que la curva del Covid-19. “Somos las caras visibles, pero juntas al gran trabajo de Flavio Hernández que se encarga de la logística, moviendo telas y barbijos, y más de 60 voluntarios que se sumaron para confeccionarlos, podemos llevar esto día a día”, presentaba Angélica.

Se conocieron en la ONG “Lo Animal es Político”, donde reivindican los derechos de los animales. Mediante un familiar profesional de la salud, una de ellas supo de la posibilidad de desabastecimiento de insumos sanitarios, por lo que no podían quedarse de brazos cruzados. “Estamos acostumbradas a armar actividades y demás campañas voluntarias, por lo que surgió la idea de Cuarentena Solidaria Rosario”, comentó Angélica.

En un principio la idea fue confeccionar barbijos, máscaras protectoras, anteojos, guantes de latex, cloros, desinfectantes y demás, pero en plena cuarentena era complejo la adquisición de los elementos necesarios para su elaboración. Por ese motivo se centraron en los barbijos, un insumo más sencillo de realizar como primordial para evitar el contagio.

“Armamos una cuenta de Instagram (@cuarentenasolidariarosario) y tuvimos un éxito inimaginado. Al día de hoy tenemos una red de 60 costureras y costureros, mayormente chicas, que algunas hicieron por única vez, otras cumplieron una segunda tanda y otras ya van haciendo la tercera”, señala Angélica, valorando y agradeciendo el apoyo voluntario de todos ellos que no dudaron en ponerse a disposición.

“Conocíamos solamente a dos costureras, las demás se sumaron de forma voluntaria. También coopera mucha gente difundiendo esta campaña. Algunos donan dinero para la compra de friselina, y también supimos que muchos escribían nuestros datos en los ascensores de edificios y demás, así que mucha gente nos fue contactando también de forma directa”.

Todos los llamados que tenían diariamente de personas que se sumaban a la campaña, obligó a Cuarentena Solidaria Rosario a organizarse y armar una logística organizando de acuerdo a las zonas de la ciudad. “Flavio utiliza su vehículo para buscar la tela donada y repartirla a las costureras para su confección, y en el viaje vuelve con los barbijos que van elaborando”, contaba Angélica.

Actualmente ya entregaron más de 2.500 barbijos y tienen 1.000 en confección. Algunas de las veinte entidades que recibieron sus barbijos son el Hospital Vilela, Hospital Geriátrico, Maternidad Martin, varios centros de salud, la ONG Rosario Solidaria, personal del Sies, Prefectura Naval, Unidades de policía, dirección general de tránsito, programa municipal de niñez, adolescencia y familia, recolectores urbanos independientes, Fundación Conin, Fundación Topiarte, entre otras.

Como toda campaña y organización, se encontraron con dificultades. Una de ellas fue el momento en que no conseguían friselina, porque no había en cantidad. Hasta que luego, con el permiso municipal de estos locales para la venta al por mayor, pudieron acceder a ellos gracias al aporte económico que habían recibido en sus cuentas bancarias.

También se había generado la discusión de si los barbijos servían o no, por lo que para algunas costureras era una incertidumbre. Por dicho motivo, consiguieron la aprobación de un epidemiológico municipal y de diferentes médicos para continuar con su elaboración, por lo que a cada costurera le enviaban un video tutorial para respetar los detalles de su elaboración.

“Nuestra demanda viene continua. Y como no vendíamos, más allá de que en Rosario ahora sea obligatorio para salir a la vía pública, las personas particularmente no nos piden porque saben que es una campaña de donación en cantidad para las entidades que lo necesitan. Pero también aprovechando esta demanda del vecino, incorporamos la venta en un local, donde cuesta solo $30 y usamos ese dinero para juntar fondos y comprar más friselina, así que es una cadena de solidaridad”, destacan desde la organización.

Ya recibieron un total de $40.000 de diferentes donaciones, para así abastecer de barbijos no solamente a las entidades anteriormente mencionadas de Rosario, sino también de San Nicolás de los Arroyos, Funes, Villa Gobernador Gálvez, y demás.

Para esta nueva etapa, continuando con la elaboración de barbijos y buscando aumentar la cantidad de costureras, van por las vinchas impresas en 3D. “La cuestión ecológica también nos hace un poco de ruido, con tantas cosas desechables. Entonces empezamos a ver que estas vinchas funcionaban, y apareció una persona solidaria que aporta a la campaña imprimiendo y dejándonos a precio de costo”, contaba Angélica. Estas máscaras serán duraderas y se descartará solo el material que utilicen, para lo que están decolorarando radiografías usadas debido a la emergencia que esta pandemia demanda. Serán una 120 vinchas que las recibirán esta semana.

"No hemos planificado más allá de no cortar con la compra de friselina, buscar nuevas costureras, y creo que lo más innovador son las máscaras que estarán para los próximos días", concluían desde Cuarentena Solidaria Rosario, invitando a todos los rosarinos a seguir cooperando para anticiparnos todos juntos al pico de esta pandemia.

 

Por Matías Zupel - Fundación Rosario



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