“El primer paso fue que sepan que estamos. Ahora lo que buscamos es que la gente venga y conozca a las 250 personas de alta calidad que se forman en Rosario a través de la Universidad pública; y en nuestro caso, en las Facultades de Química, Bioquímica y Farmacia. El objetivo es suscitar nuevas vocaciones científicas para este tipo de carreras que requieren dedicación y un esfuerzo importante y también es una forma de devolver a la sociedad lo que paga con sus impuestos”, agregó la vocera del Instituto.
“Los chicos –cuenta– tienen el ADN de los investigadores; tienen la capacidad de asombro y de sorprenderse con lo nuevo que caracteriza a los científicos, por eso les entusiasma el desafío de ver una proteína o la secuencia de un gen y caminar por los pasillos y laboratorios, de la mano de los investigadores del IBR”.
En esta oportunidad, después de una charla introductoria, los visitantes podrán ver algunos de los laboratorios guiados por los científicos y hacer experimentos con sus propias manos. La visita tiene una duración total de una hora y media, e incluye laboratorios y equipamientos donde los propios investigadores presentan y explican su trabajo, en espacios didácticos para niños de 3 años en adelante.
Habrá seis grupos de ingreso, cada media hora, a partir de las 10, en los que se distribuirán las 400 personas ya inscriptas (más de 100 quedaron en lista de espera para la próxima convocatoria), entre las cuales hay 100 niños de 3 a 8 años. La tarea se va a desarrollar con el trabajo voluntario de 70 trabajadores del Instituto.
Según informaron desde el Instituto, el cupo para la visita del sábado 30 de septiembre ya está cubierto. “Esta actividad la hacemos siempre en septiembre, así que cada mes de agosto se abre la inscripción. Los interesados en sumarse, deben ingresar al sitio web del IBR e inscribirse”, señaló Zoni.
Otras actividades del IBR
El Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario recibe, todos los meses, a escuelas de primaria y secundaria que visitan las instalaciones. También cuentan con el Programa Libre ciencia consistente en la iniciativa inversa, es decir que son los investigadores los que van a las escuelas de la ciudad.
Además, llevan adelante la tarea de capacitación de docentes y la organización de charlas de divulgación abiertas a la comunidad, sobre las temáticas más diversas: biorremediación bacteriana para purificar el agua; importancia de las proteínas; grasas y bacterias; mejoramiento de la fertilidad y tuberculosis, una enfermedad aún no extinguida, entre otras.
Fuente: Rosario3.com