10 de marzo de 2021

El gesto de Abel Pintos resuena en las orquestas rosarinas

Los jóvenes músicos no salen del asombro de haber tocado junto al artista en el Teatro La Comedia. Destacan el inolvidable momento y valoran el trabajo de las orquestas y bandas de los distritos de Rosario.

Fue el pasado martes 2 de marzo cuando Abel Pintos estuvo en el Teatro La Comedia y cantó junto a algunos de los integrantes de las bandas infanto-juveniles de Barrio Ludueña, del Centro Municipal Distrito Sur Rosa Ziperovich y del Centro Municipal Distrito Norte Villa Hortensia. Valoró el trabajo que llevan adelante los coordinadores de cada uno de ellos y la dedicación de los jóvenes artistas.

El músico se encontraba en la ciudad en el marco de sus presentaciones en el Anfiteatro Municipal Humberto de Nito. En la última parte del ensayo, la voz del famoso cantante se impone y el telón del Teatro La Comedia se levanta para dar paso al propio artista en persona. Mucha emoción, caras de sorpresa, desconcierto, y profesionalismo paramantener la mirada centrada en las partituras y acompañar la voz de Abel Pintos.

El cantante resaltó que le gustó mucho lo que escuchó y compartió opinión y consejo: “No importa a qué se dediquen en el futuro, importa haber aprendido a tocar en grupo, aprender a leer y, sobre todo, a relacionarse con un instrumento. A esta edad está buenísimo; y si no es así, en unos años me dicen: al final, nada que ver con todo lo que dijiste”.

Sebastian Tesei es Director de la banda infanto-juvenil Centro Municipal Distrito Sur Rosa Ziperovich. “Somos un gran equipo de coordinadores, directores, profesores y un apoyo incondicional del estado municipal. Día a día trabajamos en la formación de niños músicos, pero sobre todo en su desarrollo como personas que a través de la música y la ejecución de un instrumento van creciendo y relacionándose en sociedad”, relata.

Fue inolvidable la experiencia con Abel Pintos. Me tocó estar al frente del ensayo porque solo un director debe estar. El gesto inconmensurable, y más en estos tiempos que nos toca vivir, llenó de emoción y ganas de seguir avanzando en este proyecto de bandas y orquestas juveniles. Agradecido, en nombre de los chicos, a todos los que hicieron realidad este sueño, e invito a todos jóvenes y niños que quieran conocer 'El maravilloso mundo', como cantaba Louis Armstrong, a acercarse a los distritos (Norte, Sur y Noroeste) de nuestra ciudad”, comentó Tesei.

Pilar Fernández toca en la banda del distrito sur desde los siete años. Hoy tiene 16 y cuenta la experiencia de lo sucedido y vivido en el Teatro La Comedia, y su agradecimiento por los espacios para la música en la ciudad: “Me parece sumamente importante que intérpretes reconocidos como Abel Pintos nos den un espacio a nosotros como artistas”. Pilar entiende que la música es un lenguaje universal, y tener la posibilidad de poder tocar en un espacio con más personas es una experiencia mágica. “También destaco que es muy relevante el hecho de brindar oportunidades a chicos que muchas veces no tienen ni para el colectivo. Son muy necesarios los espacios en los que se puedan generar arte sin necesidad de muchos recursos, por eso también creo que hay que abrir más escuelas de música en la ciudad y en la provincia, tal como la escuela Nigelia Soria, a la cual tuve la suerte de entrar y asistir. Sé que muchos chicos no tienen accesos y eso realmente es una incomodidad que me invade, pero agradecemos la presencia de estas escuelas, de estas orquestas que se acercan a los barrios de la ciudad. No me imagino mi vida sin la música y no quiero que ningún chico se la imagine sin ella”, expresa Pilar.

Por otra parte, Ailín Pescia toca la flauta traversa desde hace 11 años en la Orquesta Distrito Norte Villa Hortensia bajo la dirección de Carlos Goldfeld. “Comencé en la primaria, ahora ya en cuarto año de la Facultad y tengo un trayecto re largo con un montón de oportunidades que me dio la banda y que siempre se lo agradezco. Me permitió tocar en diferentes ciudades, en distintos encuentros de bandas, orquestas, como en las Colectividades, en la jura de la Bandera en su Monumento nacional. La banda siempre nos dio este encuentro que tenemos entre amigas, puede lograr una unión entre personas más allá de la finalidad que tiene”, expresa la joven.

Ailín cuenta que la sorpresa de Abel Pintos le pareció magnífica, resaltando que la experiencia de tocar con un artista de esa grandeza es buenísima y quizás irrepetible para muchos. “Nos dio unas palabras muy similares a lo que nos dicen nuestros profesores para poder progresar en nuestra carrera, que puede ser profesional o puede ser un hobby, pero hacerlo con mucha pasión y disfrutarlo. Este encuentro es un incentivo, de hecho personalmente siempre tengo momentos baches en lo que analizo si me quedo donde estoy y sigo estudiando mi carrera, o si sigo perfeccionandome con la flauta traversa”, agregó.

Espero que esto pueda servir como incentivo para las personas que desconocían a las bandas y orquestas municipales, que están en distintos barrios y siempre están abiertos a darte oportunidades y experiencias increíbles”, concluyó Ailín.

Esta actividad es un impulso para arrancar el año con todo”, sostuvo la coordinadora de la Escuela de Orquesta Barrio Ludueña, Mariángeles Carmona, en contacto con medios de la ciudad. Al mismo tiempo lamentó que por cuestiones de protocolo y medidas de cuidado sólo una cantidad ínfima de músicas y músicos pudo participar del evento, ya que cuentan en aproximadamente con 500 jóvenes que forman parte de este proyecto pedagógico, artístico y social.

La coordinadora destacó, además, el trabajo musical que se realiza con las bandas y orquestas, con guitarras, percusión, vientos, y mencionó que, en este momento, está en suspenso la iniciativa de llevar el proyecto al resto de los distritos de la ciudad. “Pero el plan es empezar a ganar terreno en el resto de los distritos; los instrumentos están, la gente está, es cuestión de ir e invitar a todas y todos a tocar”, concluyó.

Victoria es violonchelista de Barrio Ludueña y también compartió su experiencia: “Tocar con Abel Pintos fue una experiencia muy increíble para mí. Verlo a menos de tres metros de distancia y que cante para nosotros, mejor dicho, cante con nosotros mientras tocábamos una de sus obras fue increíble. En lo personal quedé muy impactada cuando empezó a cantar porque nunca había estado tan cerca de un artista de semejante trayectoria y me impresionó muchísimo”. La joven rosarina agrega que esto es un incentivo muy grande para seguir en la música porque nunca se hubiera imaginado tocar con “alguien tan grande y tan genio como él. Después me sentí muy orgullosa de lo que había pasado, cuando caí me di cuenta de que era algo inimaginable. La verdad que me llenó muchísimo y son experiencias que van a quedar en mi mente para siempre. Siento que me enriquece mucho como artista, fue un gran honor tenerlo con nosotros, fue un honor haber podido hablar además con él. Gracias a esta experiencia, gracias a él, siento un orgullo muy grande, fue hermoso”.

 

Por Matías Zupel | Fundación Rosario

 

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